GRECIA.ESTADO DE SU EMBARAZO.
 El mes pasado, Grecia salió de su tercer programa de rescate, oficialmente "poniendo fin" a la prolongada crisis de ocho años del país. Después de una inversión de rescate de 288 mil millones de euros, la más grande registrada, y la constante amenaza de expulsión de la Unión Europea (el que alguna vez se temió,el famoso "Grexit"), Pierre Moscovici de la Comisión Europea de Asuntos Económicos y Financieros declaró:
"Hemos tenido ocho años muy difíciles, a menudo muy dolorosos, en los que hemos tenido tres programas sucesivos. Pero ahora Grecia finalmente puede pasar la página en una crisis que ha durado demasiado ... lo peor ya pasó ".
Donald Tusk, presidente del Consejo Europeo, recurrió a tonos de felicitación similares, al escribir en Twitter: "¡Lo hiciste! Felicitaciones a Grecia y su gente por terminar el programa de asistencia financiera. Con grandes esfuerzos y solidaridad europea, aprovechaste el día ".
Con esto, Grecia finalmente se considera un país económicamente viable: uno que puede sobrevivir sin la necesidad de medidas de austeridad regulares, y cuyo presupuesto puede ser supervisado de cerca por Bruselas. Según Mario Centeno, presidente del Mecanismo Europeo de Estabilidad (ESM, por sus siglas en inglés): "La economía de Grecia está creciendo nuevamente, hay un superávit comercial y presupuestario, y el desempleo está cayendo constantemente".
UNA RECUPERACION A LO PIRRO.
Sin embargo, a pesar de todos los elogios y el intento de los medios griegos de convertirlo en un triunfo para la administración de Syriza, la "victoria" no ha sido más que pirrica para el pueblo griego. El sistema tributario griego todavía está conectado a medidas basadas en la austeridad, con pequeñas empresas que luchan por pagar un IVA insostenible del 24% sobre todos los bienes y servicios. Los jubilados que se consideraban los principales aportantes de las familias de bajos ingresos están luchando,por sobrevivir, con sus reducidas pensiones.

Y mientras que varias ONG aún operan dentro del país en un esfuerzo por brindar asistencia a los hogares pobres, también han comenzado a retirarse del ojo público a medida que los votantes griegos culpan cada vez más a un Estado que no está dispuesto a asumir eimplementar medidas de ayuda social.
Incluso la fachada de una economía en auge, con aumentos marcados en las exportaciones y un aumento proyectado del 5,2 por ciento en el superávit, puede no contener mucha agua.
LA ALTA DEUDA PUBLICA.ALTA TASA DE DESEMPLEO.
Yannis Stournaras, el ex ministro de finanzas y actual gobernador del Banco de Grecia, comentó: "Sigue habiendo problemas importantes, como la alta deuda pública, la baja calificación crediticia del país, la alta tasa de préstamos improductivos, el alto desempleo y la inversión.

La deuda actual de Grecia es de aproximadamente 329 mil millones de euros, de los cuales los 61,9 mil millones de euros distribuidos al país por el ESM apenas rozan la superficie. Combinado con la tasa de desempleo proyectada del 19,7% en el país, una cifra que la Confederación General de Trabajadores Griegos sitúa cerca del 27% , el país, una vez más, se encuentra atrapado entre la espalda y la pared.

La alta tributación y las duras medidas sociales dieron poco o ningún resultado a largo plazo. La competitividad de Grecia se ubica por debajo de todas sus E.U. socios, y el país apenas supera a Rumania en el índice de corrupción de Transparency International. Más de $ 105 mil millones de los bancos del país siguen atados al capital no rentable para impulsar el sector privado, mientras que la edad de jubilación ha aumentado a 68 añps de edad y mientras que las tasas de natalidad están disminuyendo drásticamente.
PRIVATIZACIONES A GRAN ESCALA.

Además, Grecia ha realizado una privatización a gran escala de sus servicios públicos y activos estatales: entregó el control del puerto de El Pireo a un consorcio chino. Vendió su sistema ferroviario de pasajeros a una empresa italiana por una fracción de su valor.Liquidó los derechos de gestión de 14 aeropuertos a Fraport en un intento desesperado por cumplir con los estándares de rescate anteriores.
LA LARGA ESPERA,UNA DECADA MAS.MAS REFORMAS.
En su estado actual, se espera que el país tarde al menos una década en recuperarse con un período proyectado de 20 años antes de que su economía vuelva a los niveles anteriores a la crisis. Y mientras el primer ministro Alexis Tsipras ha prometido revertir una serie de medidas de austeridad forzadas en la economía griega, Klaus Regling, jefe de la ESM, proyectó que Grecia todavía podría convertirse en un pr´+oximo actor con éxito pero , "siempre y cuando se atenga a las reformas económicas acordadas incluso después del final del tercer memorandum".
Este puede ser un camino largo y difícil de recorrer, dado el número de elementos problemáticos de la economía griega que quedan después de la crisis de ocho años: el gasto público demasiado inflado consume casi el 40% del PIB del país, mientras que el turismo solo genera el 13% y el patrocinio político sigue desempeñando un papel de suma importancia.

LA INFLACIÓN.BAJOS SALARIOS.LO PEOR ESTA POR VENIR.

La fuga de cerebros de Grecia sigue siendo fuerte, ya que los mejores y más brillantes investigadores  huyen del país, dejando que el resto se vuelque a mercados clandestinos e ilícitos. Como resultado, la inflación en la creciente economía negra representa aproximadamente el 20% del PIB. Los empleadores han estado muy dispuestos a aprovechar la situación, dando como resultado un empleo generalizado a tiempo parcial para adultos con salarios significativamente reducidos.
¿Dónde deja todo esto a los contribuyentes y votantes griegos? La cobertura de los medios de comunicación ha sido mixta, desde elogios a un pesimismo silencioso, pero parece que al final, muy poco ha cambiado. Algunos todavía tratan el régimen de austeridad y el terrible resultado económico como si nada hubiera ocurrido. Mientras tanto, otros han optado por criticar abiertamente el fracaso de los gobiernos anteriores y examinar la historia en un esfuerzo por evitar repetirla.
LA DEUDA SIN FIN.
Pero la mayoría silenciosa no puede dejar de lado el temor de que todo esto podría ser el preludio de algo peor que aún está por venir. Después de todo, Grecia aún debe realizar sus pagos de 600 millones de euros cada seis meses si quiere mantenerse en el lado bueno de la UE. El mensaje de Atenas: No cuentes con ello.